Las amplias dehesas del valle del Alagón, en el noroeste de Extremadura, proporcionan alimento y calidad de vida al ganado caprino y porcino. Motivo de orgullo son también los terrenos dedicados al cultivo del olivar. aprovechando sus recursos naturales, los habitantes de este valle obtienen alimentos de primera calidad. Vamos a conocer algunos ejemplos que muestran el sabor tradicional de esta sierra: quesos, chacinas y aceite.