Desde 1941, la Tonelería Burgos desarrolla un papel fundamental. Proporciona las barricas de roble que, con el paso de los años, convertirán el mosto en buen vino. Las exigencias de los tiempos han motivado la industrialización del proceso de elaboración de los toneles. Pero Mariano Burgos conserva frescos los conocimientos de antaño y recrea la fabricación artesana, que comienza con la elaboración de las duelas, las tablas que darán forma a los barriles.