La perdiz roja es una especie sedentaria que se distribuye por toda la Península Ibérica hasta Baleares. Pertenece a la familia de las gallináceas, al igual que la codorniz y el faisán. La caza con trampas, la habilidad de los campesinos en la imitación de su canto, la cetrería y la caza al salto con perros adiestrados han sido las técnicas más tradicionales para su captura. La perdiz como alimento y el uso de las plumas para los cobertores de cama han sido los principales aprovechamientos. Algunos cazadores prefieren conservar la pieza capturada como trofeo y el taxidermista se encarga de esta tarea.