En el Somontano de Barbastro, bajo los pies del monte y de la ermita de La Candelera, se extiende el pueblo de Salas Altas.
Las campanas siempre han cumplido una función comunicadora que las hacía imprescindibles en todo núcleo habitado. Hoy, algunos toques todavía siguen vigentes. Montse y Joaquín, miembros de la última generación de campaneros que se ocupaban del toque y del cuidado de la ermita, junto con Miguel, que ha perpetuado esta tradición por afición, nos van a mostrar los toques que se realizaban para los diferentes acontecimientos sociales.